Una y otra vez volvería a oler su olor y volvería acariciar su piel con la punta de mis dedos, muy despacito, mientras él, poquito a poquito, me dice que soy la reina de sus sueños.
Una y otra vez volvería a caer para que él con sus manos me recogiera y me levantara y que tan solo con su mirada yo ya supiera que la vida no se acaba, que la llama no se apaga.
Una y otra vez al verte sabré que la llama que nos une será siempre nuestra y que nunca se apagará sino que cada día lucirá más.
1 comentario:
wolaaaa!!
has vuelto del pueblo!!!
bueno pos re nena que me gusta este post un besito
arew
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